Entrevistas

Juárez en foco: el auge del cine fronterizo

  • Por Editora M

Ciudad Juárez.— Lo que antes parecía un sueño lejano para los cineastas de la frontera comienza a tomar forma. 
Entre cámaras, guiones y nuevas oportunidades, la industria cinematográfica en Ciudad Juárez vive un proceso de expansión y consolidación, impulsado por el talento local y por la creciente colaboración con El Paso, Las Cruces y Chihuahua. 

Aunque los incentivos fiscales aún son un obstáculo frente al modelo de Nuevo México, la región se abre paso con proyectos, festivales y producciones que comienzan a dejar una huella visible en la economía y la cultura local.


Desarrollo:
El crecimiento del cine en la frontera norte ha encontrado un aliado clave en el Oculto Film Festival, una plataforma que desde su creación ha apostado por la difusión del cine de terror, fantasía y suspenso, pero sobre todo por visibilizar el talento local.

“Nosotros tenemos una rama específica para el talento regional, porque sabemos lo importante que es exhibir proyectos de aquí, de la frontera. 

No solo queremos mostrar cine de todas partes del mundo, sino que también buscamos que quienes nos visitan conozcan lo que se hace en Juárez, El Paso y ahora también en Chihuahua”, explica Cabe Tejeda, director de Oculto Film y fundador del festival.

Tejeda subraya que esta expansión del concepto de “frontera” ha permitido integrar a una comunidad creativa cada vez más sólida, donde convergen productores, guionistas, fotógrafos, actores y técnicos. 

“Queremos que otras personas que vienen a visitarnos puedan disfrutar del trabajo local y, al mismo tiempo, incentivar la creación cinematográfica en Juárez y El Paso. 

Es una manera de construir una identidad visual y cultural desde la frontera”, añade.

Sin embargo, el contexto económico juega un papel determinante. 
En Nuevo México, la industria cinematográfica se ha fortalecido gracias a un incentivo fiscal conocido como tax rebate, mediante el cual las producciones reciben una devolución de un porcentaje de su inversión local. 

“En Chihuahua y en Texas todavía no existe ese esquema, aunque en El Paso ya se trabaja en una iniciativa similar. 

Esa diferencia marca mucho el ritmo de producción”, comenta Tejeda.
El resultado de estos incentivos en Nuevo México ha sido evidente: un flujo constante de producciones, sets, empleos y derrama económica. 

Ejemplo de ello es la reciente filmación de One Battle After Another —protagonizada por Leonardo DiCaprio y Benicio del Toro, dirigida por Paul Thomas Anderson—, parte de la cual se rodó en El Paso. 

“Eso nos demuestra que la región tiene potencial para albergar proyectos de gran escala. 

En Chihuahua capital también se está grabando actualmente una película, lo que confirma que el movimiento está en marcha”, apunta el director.

La labor del comisionado fílmico de Chihuahua, Luis Zedillo, y del comisionado de El Paso, Dru Mayer, ha sido esencial para atraer nuevas producciones, detalla Tejeda, al señalar que su trabajo busca posicionar a la región como un punto estratégico para la industria cinematográfica del norte del país.

“Hacer películas no solo es soft power, es decir, una forma de proyectar nuestra cultura y nuestra identidad. 

También representa una importante derrama económica; una sola producción puede generar hasta 20 millones de pesos. 

Si logramos que más producciones lleguen a Juárez, ganamos todos.”
El auge del cine en Ciudad Juárez ya no es una ilusión, sino un proceso en marcha. 

Entre festivales como Oculto Film, las gestiones de las comisiones fílmicas y el empuje de los creadores locales, la frontera se perfila como un nuevo epicentro cinematográfico en el norte de México.

Más que un escaparate de películas, el movimiento representa una apuesta por la identidad cultural, el desarrollo económico y el poder de contar historias desde el borde del país, donde cada toma, cada rostro y cada escenario cargan con la esencia única de Juárez.