El acuerdo comercial de México con Estados Unidos y Canadá (T-MEC) está en la mira conforme se acerca la asunción de Donald Trump como presidente del país vecino. La presencia de inversión China en México y la exportación de productos asiáticos al mercado estadounidense aprovechando el acuerdo comercial, representa para los socios comerciales de nuestro país una competencia desleal puesto que las reglas del T-MEC son para beneficiar a quienes integran el acuerdo y China representa la competencia más agresiva para cualquier mercado en este momento. Las amenazas de cancelar el tratado y sancionar la competencia desleal china, amenaza no solo a México, sino que tendría un impacto directo en el estado de Chihuahua. Recordemos que en nuestra entidad la industria manufacturera está consolidada como líder en el país, de acuerdo con cifras oficiales del Inegi y el Centro de Información Económica y Social (CIES). Dentro de los resultados que Chihuahua ha registrado en cuestión de manufactura, se encuentra su lugar en exportaciones, en comparación con otros estados. En el 2023 representaba el 13.3% del total a nivel nacional, seguido de Coahuila, Nuevo León y Baja California, además de Guanajuato. El liderazgo está en la manufactura de los electrónicos. Chihuahua ocupa el primer lugar con 40.7%, seguido de Baja California con 19%, Jalisco con 17.4%, Tamaulipas con 8.5% y, finalmente, Nuevo León con 5.9 por ciento. Destaca también en fabricación de equipo de transporte y mantiene el liderazgo en la creación de empleo, aún con la situación que priva en Ciudad Juárez el principal polo industrial donde hay altibajos. Por eso la importancia del desenlace que tendrá la disyuntiva de México frente a las presiones ya no solo de Estados Unidos, también de Canadá, para frenar a China en el territorio mexicano. Claudia Sheinbaum se ha visto tibia y no advierte el huracán económico que pudiera devastar al país o fortalecerlo si va en la misma tónica que sus aliados comerciales. Claudia insiste en que Estados Unidos tiene más exportaciones directas de China que México. Lo dijo el viernes al estilo chairo, aunque anunció que se elabora un plan para restringir la llegada de productos chinos a nuestro país. Desde la conferencia de prensa que encabeza desde Palacio Nacional que la Secretaría de Hacienda y de Economía ya trabajan en un plan a modo de poder sustituir las importaciones procedentes de China. El anunció se da en el marco en el que el T-MEC será discutido el próximo año, evento que las autoridades de Canadá -en específico de Ontario y Alberta-, han aprovechado para pedir la exclusión de México argumentando la relación con el país asiático. Bajo esa tónica, la presidenta no sólo insistió en que el primer ministro canadiense, Justin Trudeau se ha mostrado a favor de la continuidad del mismo, sino que además muchas de las importaciones que hay en Estados Unidos son chinas; no obstante, se trabaja en el plan a modo de no afectar los acuerdos comerciales. Eso dijo. Pero insiste en que está la idea de que la mayoría de las importaciones presentes en el país vecino, llegan desde México es errónea. Señala que muchos productos cuentan con un porcentaje mínimo de contenido procedente de China. Cómo ejemplo señaló en una reunión con empresarios semanas atrás que los automóviles que se fabrican en México, sea que se exporten a Estados Unidos o que se queden en México, tienen solamente 7% de contenido de productos que vienen de China. En Estados Unidos es 9% y si nos vamos sector por sector, está ocurriendo así, dijo. Pero Estados Unidos y Canadá tienen otros datos. Desde la campaña Trump advirtió las consecuencias de llegar a la Casa Blanca. Las medidas comenzarán con los automóviles de procedencia China. “Notificaré formalmente a México y Canadá mi intención de invocar la cláusula de renegociación a los seis años del acuerdo”, expuso Trump en plena campaña en el Detroit Economic Club, una plataforma no partidista enfocada en el debate de cuestiones empresariales, gubernamentales y sociales. El expresidente también adelantó una serie de acciones para rescatar “del colapso” a la industria automotriz norteamericana. Trump argumentó que las armadoras chinas están construyendo plantas en México y aprovechando las condiciones del T-MEC para introducir una gran cantidad de vehículos a Estados Unidos y una vez que ha triunfado, reiteró que, impondrá cargas más elevadas a las importaciones, eliminará en su totalidad los impuestos en los intereses de préstamos automotrices y ofrecerá exenciones tributarias a las empresas que trasladen su producción al país. En Chihuahua hay incredulidad y confianza de que todo siga igual. Los representantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) Chihuahua y Coparmex Chihuahua, señalaron a la prensa que resulta muy poco probable que se expulse a México del T-MEC, por la relación comercial que existe. “Lo vemos sumamente improbable. Estados Unidos tiene intereses en México: las cadenas productivas están sumamente integradas”, manifestó el presidente de Coparmex Chihuahua, Salvador Carrejo Orozco. Esperemos que su confianza permanezca y todo quede al calor político que precedió a la llegada de Trump. Pero en el 2025 habrá renegociación del T-MEC.
