[Hay tiro cantado entre Komaba y Cuevas]

Pues resulta que las cosas andan mal entre los jefes de la Policía Vial, eso dicen y eso se ve a kilómetros, aseguran los oficiales.

Una de las pruebas, al menos la más reciente, fue la carta que unos oficiales de vialidad enviaron a todos lados, reclamando supuestamente los perdones del Subsecretario de movilidad, César Komaba, a influyentes que son atorados en los retenes antiebrios.

Dicen que esa carta como quien dice llevaba la firma del director operativo de la Policía Vial, Rafael Cuevas.

Si bien es cierto que siempre se les hace el paro en esos retenes a influyentes, policías, servidores públicos, familiares de oficiales, políticos y no se diga a malandros, la carta en la que empinan a Komaba, dicen, es como quien dice, “ropa sucia que se lava en casa”, pero como Cuevas no lo ve así, pues movió a sus lamebotas para que le hicieran el favor de ventilar el asunto.

Cuevas, el director fantasma, como lo llaman en vialidad, llegó a Chihuahua procedente del estado de Puebla, donde lo dieron de baja de la policía, quién sabe por qué.

Fue el secretario de seguridad pública del estado, Gilberto Loya, quien como favor para un amigo se trajo a Cuevas a Chihuahua y desde que llegó, según se comenta en la Policía Vial, se la ha pasado molestando al personal, lo acusan de abusón y de colgarse el trabajo de los demás.

Dicen que el jefazo Cuevas, parece que lo único que quiere es tumbar a Komaba y quedarse con su puesto. A ver en qué termina este asunto. ¿Será?