El Zorro Dominical

Los Lopitosh

  • Por El Zorro
Los Lopitosh

Mucho antes que Lópitosh pronunciase las famosas frases del  “yo tengo otros datos”, el “No me vengan con el cuento de que la ley es la ley” y “Nos vino esto como anillo al dedo” o el “Me canso ganso”, que marcaron el sexenio actual, los mexicanos de la generación baby boomers conocieron otros dos Lópitosh que también marcaron el rumbo de México para bien o para mal y cuyas frases aún permanecen en la memoria colectiva de los mexicanos y por supuesto, El Zorro, El Bisonte y La Fuente las recuerdan. En realidad fueron 3 Lópitosh, el primero Antonio López de Santa Ana que perdió y vendió la mitad del país a los Estados Unidos. Aún así fue reelecto hasta en 9 ocasiones presidente y convertido en dictador y considerado el primer vendepatria mexicano. Posteriormente vendría Lópitosh Paseos quien ganó el mote por viajar por todos lados, claro, mucho  antes de que el Peje construyera el tren maya y le diera la vuelta a todo el territorio mexicano con Rojitas. Adolfo López Mateos gobernó México de 1958 a 1964,  logró el acuerdo que permitió la devolución de El Chamizal en plena guerra fría. Se le atribuye haber dicho: “A mi izquierda y a mi derecha está el abismo. Yo soy de extrema izquierda dentro de la Constitución”. Lo dijo en plena guerra fría, quizás en plena persecución de los movimientos de izquierda en Latinoamérica por la Cia y claro en México donde lograron que la misma autoridad mexicana persiguiera a los comunistas y socialistas. Don Lópitosh Paseos quien también fascinó a las masas con el falso discurso de la revolución, escrita con r, no con t, decía que: “La revolución mexicana fue la revolución perfecta, pues al rico lo hizo pobre, al pobre lo hizo pendejo, al pendejo lo hizo político y al político lo hizo rico”. Lo afirmaba aún y cuando Lópitosh Paseos formaba parte de los gobiernos emanados de la que ahora llaman la tercera transformación, que en realidad es el movimiento que inició Pancho Madero en 1910 tras ser arrestado para bloquear su candidatura a la presidencia. Paseos debía su cargo a don Adolfo Ruiz Cortinez, el presidente famoso por su honradez tras haber custodiado el tesoro de la nación tras el asesinato de Venustiano Carranza en 1920. Ruiz Cortinez lo eligió como el menos peor de los aspirantes a la Presidencia tras un juego político que puso en marcha y que después sería conocido como el tapado, método usado por la vieja escuela del PRI para elegir candidatos, principalmente al candidato a la Presidencia; algo así como las famosas encuestas decretadas por el último Lópitosh para elegir a los candidatos de la cuarta transformación, esa si con t.  Ambos métodos de elección de candidatos en realidad son dedazos, si no que muestren las encuestas y que algún morenista diga si le preguntaron a quién quería de candidato. Y tan ya no le volverán a preguntar nunca que el mismo Lópitosh Obrador dijo hace unas semanas que cuando su movimiento iniciaba batallaba para encontrar candidatos, se le escondían, pero después del 2018 al pueblo que llegaba a visitar, los aspirantes eran tantos que sugirió poner letreros de cuidado con los candidatos, no los vayan a atropellar. Ahora le sobran y en Morena todos se sienten con ese derecho; pero ya se resignaron al dedazo disfrazado de encuesta. El tercer Lopitosh se apellidaba Portillo y gobernó México de 1976 a 1982. Es el más polémico hasta ahorita. Ni el cállate chachalaca le gana. Nomás échenle un ojito. Alguna vez dijo: Los mexicanos que han sufrido carencias ancestrales, ahora tendrán que administrar la abundancia. Cerró su sexenio con aquella negra frase de “Es ahora o nunca".  Ya nos saquearon, México no se ha acabado. No nos volverán a saquear”, que precedió a una fuerte crisis económica que le sumó muchos ceros al peso de tanta devaluación y puso al dólar a más de 3 mil por uno. Su sexenio fue marcado por el siniestro jefe policíaco que dejó escuela de corrupción en México. “Tan pronto le di la mano, me dije, a éste ya me lo chingué”; Voten por López Portillo. Es un buen hombre, él me hacía las tareas”, decía en campaña Arturo el negro Durazo para apoyarlo. Lópitosh segundo también tenía su pleito casado con los medios de comunicación tal y como sucede en la era que termina, o más bien empieza y amenaza con permanecer en México por 70 años o más.”No te pago para que me pegues”  La frase es usada para ejemplificar el uso de la publicidad oficial en México como método de coerción y censura a los medios de comunicación.  Al finalizar su sexenio, no cumplió con México, tuvo una serie de variables que lo caracterizan como la corrupción gubernamental, la solicitud de préstamos impagables (Deuda externa) y salida de capital extranjero (en un mes salieron del país 9,000 millones de dólares), lo que ayudó a multiplicar la deuda externa y a devaluar en más de 400% el valor del peso. Para 1982, México había sido afectado por la más profunda y prolongada recesión económica del periodo posrevolucionario. Del último Lópitosh apenas se hará el recuento de los daños, aunque ya el peso está temblando, la inseguridad sigue, la impunidad rampante en temas como migración y política  están presentes y la vieja escuela de priístas, panistas, perredistas, hoy convertidos en morenistas purgados de sus pecados,  se aprestan a dar continuidad y reeditar al cuadrado al viejo sistema que va implícito en las reformas del Plan C y el control total del sistema político mexicano. En fin, los Lópitosh.