La detención de Leonardo Daniel M. V., alias “El Pato” aquí debería representar un golpe importante contra el Cártel de Sinaloa. No todos los días cae un presunto cabecilla del narco, menos aún en una zona tan caliente como el Valle de Juárez. Sin embargo, la historia parece desdibujarse tan pronto como comenzó: después de un operativo conjunto entre el Ejército, la Guardia Nacional y la Fiscalía estatal, el líder criminal terminó consignado únicamente por “desobediencia y resistencia a la autoridad”. Una acusación menor, casi anecdótica, para alguien señalado como uno de los principales operadores del tráfico de drogas sintéticas en la región. Su detención se da en medio de tensiones entre autoridades mexicanas y estadounidenses por la falta de órdenes judiciales. “El Pato” incluso logró escapar de un primer operativo antes de ser recapturado. Se espera que más adelante enfrente cargos por delitos de mayor gravedad, entre ellos tráfico de drogas y otros ilícitos de alto impacto y ojalá la captura de un supuesto líder termina perdiéndose entre los vacíos legales.
