La Fuente Móvil

MÁS CORRUPTOS

  • Por Editor R
MÁS CORRUPTOS

No pasó desapercibido que en el equipo de campaña del alcalde con licencia Cruz Pérez Cuéllar se integraron exfuncionarios acusados de corrupción como el mismísimo Iván Pérez Ruiz y el secretario del Ayuntamiento con licencia Héctor Ortiz Orpinel y uno que otro como Julio César de la Cruz y Arturo Urquidi, el primero bueno para transar con terrenos desde Asentamientos Humanos y el segundo acusado en el mismo Cabildo de timar a los pueblos originarios. Iván y compañía intentaron nadar de muertito pero salieron a flote como si estuvieran en el tolido. El ex candidato a dirigir la Canaco apodado el Fabuloso, a quien ya tiene en la mira la Fiscalía Anticorrupción, se puso a tras del grupo en todas las fotos pero llamó la atención de cualquier forma en su mismo equipo porque no huele precisamente a jabón y fabuloso que facturó por millones al Municipio. El equipo de campaña, fue integrado por Enrique Licón Chávez, coordinador general de la campaña; Héctor Ortiz Orpinel, defensa del voto; Hugo Vallejo Quintana, coordinación operativa; Arturo Urquidi, acción territorial; Julio De la Cruz, evaluación y seguimiento, Rafael Morales, acción electoral y Carlos Nájera en comunicación. Además, María Antonieta Mendoza, titular de vinculación; Selene Landa en atención a mujeres, Rosario Pérez, grupos vulnerables; Janeth Zavala Luna, deporte; Lucy Yudico, organizaciones de la sociedad civil, Iván Pérez, empresarios; Ignacio Carmona, jóvenes; Daniel Anaya, coordinador de campaña alterna; Alejandra Poblano Espino, agenda y Julio Alberto Soto, asistente. Esas son las charolas que les dieron y en las que ya algunos tenían tres años trabajando. La presentación fue la semana pasada pero no se puede dejar de comentaras que su mismo equipo de campaña en tono de broma pero con algo o mucho de verdad, le dicen a Él Zorro que en esas fotos hay como 500 años de cárcel. Y eso que falta la regidora Ana Estrada, el oficial mayor, el de la Omej y el director de Obras Públicas, que con ellos serían mil años. Todo por convertirse en coleccionistas de denuncias. Así las cosas.